UNA MIRADA A CATAR
Campo Elías Estrada
cestradacampo@gmail.com
La última vez que Argentina y Brasil fueron eliminados, en cuartos de final, sucedió durante el mundial de Sudáfrica 2010. Alemania goleó sin piedad 4-0 al equipo que dirigía Diego Armando Maradona, mientras que Países Bajos remontó y ganó 2-1, en un partido raro para los de Dunga.
Digo que raro, porque Brasil ganaba desde los diez minutos con un gol de Robinho y tuvo para haber metido, por los dos más en el primer tiempo, ante un equipo arrinconado por los sudamericanos, que era dirigido por Bert van Marwinjk. Después, en el segundo tiempo, Países Bajos empató con un autogol, allí fue entonces cuando los brasileños perdieron el control emocional y terminaron recibiendo otro gol más. Al día siguiente, Alemania despachaba a los argentinos.
En la Copa de Mundo de 2014, Argentina disputó la final contra Alemania, mientras que el anfitrión recibió su peor paliza en un mundial, con ese recordado 7-1 que le metieron los teutones en semifinales. Fue lo más cerca que estuvimos de ver una final soñada entre los dos colosos de Sudamérica.
En el 2014, los argentinos eliminaron en semifinales a Países Bajos en penales, luego de empatar sin goles en el tiempo reglamentario.
Hace cuatro años, en el mundial ruso, Francia despachó a la Argentina en octavos de final y Brasil cayó ante Bélgica, en cuartos de final.
Y así hay más resultados entre los dos colosos de Sudamérica y los europeos, en el que unos y otros se han repartido las victorias y las derrotas. Este viernes, se abre otro capítulo más en los cuartos de final del Mundial de Catar 2022.
La sensación que dejaron, en los octavos de final, los cuatro seleccionados que se enfrentarán este viernes 9, fue la de un Brasil y Países Bajos explosivos, comparado con lo que hicieron Argentina y Croacia. Desde esta óptica todo hace indicar que los dos primeros parten como favoritos.
![]() |
Holandeses, celebran. FOTO/fifa.com |
Sin embargo, este mundial nos mostró varios ejemplos en los primeros 56 partidos, como para pensar que no todos los juegos son iguales, ni que hay enemigo pequeño. En en los octavos de final, por ejemplo, donde comenzó a cocinarse el mundial, España jamás se imaginó que Marruecos lo terminaría eliminando.
Países Bajos me impresionó contra Estados Unidos. Lucieron muy rápidos, fuertes y contundentes cuando pisan el área chica del rival. Gakpo, Depay, De Jong, Blind, Van Dijk, Timber, Klaassen, De Roon y su portero Nooppert, hicieron su mejor presentación.
Argentina, su rival en cuartos de final, presentó otro estilo con otro ritmo. Tal vez les ha costado mostrarnos lo que le vimos en la eliminatoria, inclusive, en su victoria de octavos pasó apuros sobre el final del partido, pero entre sus virtudes y defectos, tienen su mejor arma para hacer daño cuando el balón está en sus pies. Saben hacerlo rotar bien y hasta el momento es la cualidad que lo tiene entre los mejores ochos del torneo. Por fortuna, Julián Álvarez apareció con goles, en un momento dulce con las redes.
Jugador por jugador, Argentina es un equipo compacto, aunque hoy todas las miradas se las sigue llevando su 10 Lionel Messi. Han pasado problemas para cuando lo atacan con rapidez, pero consiguieron llegar a esta loma de cuartos de final sobreponiéndose a su primer traspiés que tuvo con Arabia Saudita.
Países Bajos todavía no ha sufrido una derrota (lleva tres victorias y 1 empate), han venido de menos a más, y aunque dejaron una buena impresión en los octavos de final, van a enfrentar a un seleccionado con oficio en estos menesteres. Veremos quién se aplica mejor al sistema de juego que propongan cada uno.
![]() |
Brasileños, celebran. FOTO/fifa.com |
Entre los cuatro seleccionados que juegan este viernes, tal vez Brasil fue el que más impactó por su explosión ofensiva, en cambio, Croacia, tuvo que sufrir para eliminar por la vía de los penales a Japón. El equipo que lidera Luka Modric llega con perfil bajo, pero es de cuidado. Es el actual subcampeón, que me imagino van a dejar el cuero en la cancha.
Croacia y Argentina no nos han mostrado todavía su mejor versión. Contra Brasil y Países Bajos es una oportunidad para pensar en marcar la diferencia.
Brasil podrá lucir muy favorito y todo, pero nunca se puede confiar de su juego bonito, este viernes tendrá a un rival trabajador, sin el lucimiento personal de los sudamericanos, pero con jugadores sufridos, de experiencia, con oficio, que ya saben lo que es llegar a estas instancias de un mundial.
Es obvio que quiero ver una semifinal sudamericana, pero para ello Argentina y Brasil tendrán que jugar su mejor partido, ante dos rivales que la vida igual les está ofreciendo esta oportunidad deportiva, para soñar con llegar a la fase de los mejores cuatro.
Definitivamente, este viernes será de infarto. Dios quiera que veamos seguir en la fiesta a los dos colosos sudamericanos, o al menos a uno. Sería terrible que este fuera una "viernes negro" para los últimos representantes de América.
La mejor de las suertes para Brasil y Argentina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario