UN CAMPEÓN QUE ROMPIÓ TODOS LOS MOLDES

EGAN BERNAL, EL ELEGIDO

Campo Elías Estrada
cestradacampo@gmail.com

Libro de Mauricio Silva Guzmán

Siendo ya un reconocido corredor y campeón en el ciclomontañismo que comenzó a practicar desde 2007 a la edad de 10 años, Egan Bernal se aprestaba a participar en septiembre de 2015 en el Mundial Cross Country en Andorra, Italia. Pero antes, su apoderado Pablo Mazuera que lo acompañó, decidió ir primero a Suiza a presentar un examen por escrito ante la Unión Ciclista Internacional (UCI) que lo acreditara como director deportivo. Ese viaje marcaría el asombroso antes y después del ciclista colombiano en su corta carrera deportiva.

 Cuando estaban en el World Cycling Center en Aigle (Suiza), uno de los directores de ese centro le propuso a Egan que se hiciera un test de esfuerzo. El joven ciclista de 18 años, un poco curioso por la oferta acepta con toda normalidad, total había asistido allí solo para acompañar a su apoderado antes de viajar para Andorra. Unos días después los resultados de ese examen cambiarían la historia de este ciclista que en ocho años solo había pedaleado en el ciclomontañismo.

"Días después, los resultados de aquella prueba fueron enviados a uno de los grandes clasicómanos de los noventa: Michael Bartoli, quien dirige el centro de estudios fisiológicos en Milán y, además es un cazatalentos del ciclismo mundial. El italiano se quedó mudo con un dato descomunal: el VO2 máx de Egan -que es el consumo de oxígeno máximo del organimo- era de 88,8 mililitros por kilo; medida que para alguien de 18 años es sencillamente excepcional. Solo por comparar, el británico Chris Froome marcó 88,2 mililitros en su mejor momento en el Tour de Francia en 2017. Obviamente, esa información viajó rápido entre los patrones del WorldTour", escribió el periodista Mauricio Silva Guzmán en su libro Egan, el campeón predestinado.

En el libro, Maurico Silva Guzmán reconstruye de una manera magistral toda la historia del campeón del Tour de Francia 2019, desde antes de su nacimiento hasta su momento cumbre en julio de 2019 cuando se consagró en el campeón más joven y el único latinoamericano en ganar la prueba más exigente e importante del ciclismo mundial.

En el Campeonato del Mundo de MTB, en Andorra, el colombiano terminó tercero, un puesto abajo de la posición de un año antes en el Campeonato del Mundo en Noruega.

UN ALTO EN EUROPA

Cuenta Mauricio Silva Guzmán, que estando en Andorra, Mazuera intentó conseguirle a su pupilo un equipo de MTB en Europa. "Nos fuimos de equipo en equipo, de carpa en carpa, hablando con los mánager. Pero todos decían lo mismo; que ya tenían a todos los corredores", relató el representante del ciclista.

Los comentarios sobre el increíble resultado del test de esfuerzo de Egan estaban dando vueltas en Europa y cuentan que por allí llegó al computador de Savio, el viejo mánager del team Androni Giocattoli quien ha llevado ciclistas colombianos al viejo mundo en las últimas tres décadas.

Por esos días, Paolo Alberati pasaría a hacer el nuevo apodero del colombiano, Mazuera no pudo seguir siéndolo porque no era un mánager avalado por la UCI, firmó un contrato de liberación y se quedó con el 40 por ciento de la representación. Egan quería quedarse en Italia, sabía que no podía vivir del ciclismo de montaña, por eso entre los dos acordaron como buenos amigos terminar el contrato que los unía, lo hicieron en buenos términos, como había sido la amistad entre los dos.

El colombiano fue contratado por Savio, el dueño de Androni, con el que se estrenaría como corredor de ruta. Su primera prueba fue el 20 de septiembre de 2015, en Navacchio (Italia), en la tercera edición del trofeo de otoño del Monte Pisano-Sognando II Giro delle Fiandre. 

"Egan anduvo normal en la primera parte y, luego en la última subida, los destrozó. Los dejó a todos tirados con una facilidad miedosa y nadie, absolutamente, nadie, pudo seguirle el paso. Luego, en la bajada, se le acercaron, pero, con todo, sin ninguna experiencia, Egan ganó y esa misma noche lo firmé por cuatro años" dijo Savio en el libro de Mauricio Silva.

Desde niño Egan mostró sus cualidades en el ciclismo de montaña, pero su padre Germán, un ex ciclista modesto que no pudo brillar en ese deporte, no quería que su hijo siguiera sus pasos porque no quería que sufriera como él, pero al ver la valentía, el esfuerzo, el sacrificio y su categoría en el caballito de acero, no pudo ir en contra de la razón. 

 De sus comienzos, su tía Gloria señaló que "Egan lo tomó con la seriedad de un profesional. Cuando hacíamos las reuniones del 24 y 31 de diciembre, Egan nos decía a todos: Sigan ustedes, porque yo mañana madrugo a entrenar". Y era en serio. Se encerraba en el cuarto y se dormía", señaló la familiar en el Libro: Egan, el campeón predestinado.

Sus comienzos en el ciclismo de montaña fueron de la mano con la pobreza. "Nosotros no éramos pudientes: si conseguíamos para la comida, no conseguíamos para nada más", dijo su abuelo Álvaro Julio Bernal. Por eso el ciclista zipaquireño comprendió que la salida de la pobreza estaba en el deporte.

A sus 10 años Egan se convirtió en campeón de las Copas Cundinamarca y Nacional de Ciclomontañismo. Corrió nacional e internacionalmente hasta septiembre de 2015 cuando participó en el Mundial Cross Country en Andorra, Italia.

Egan Bernal en su primer tour de Francia

ESTUDIANTE

Antes de dar el salto como rutero, Egan fue agraciado con una beca de la gobernación de Cundinamarca con la que se inscribió en la Facultad de Comunicación Social y Periodismo en la Universidad de La Sabana, en Chía, un trayecto de 22 kilómetros entre Zipaquirá y el centro de estudios, que Egan Bernal lo recorría en bicicleta.

Hay una anécdota de la facultad que habla de los tropiezos que tuvo el último campeón del tour. Fue con una compañera de clases, Carmencita Rois, que hizo pareja con Egan en una materia para un trabajo en el que cada uno tenía que ir a la casa del otro y viceversa. "Ella expuso lo que encontró en torno a este muchacho, y todos quedamos conmovidos con la vida de un campeón al que, en ese momento, le tocaba duro", recordó el profesor Aldemar Moreno.

Geraint Thomas saluda al campeón

"De un momento a otro el chino (Egan) dejó de asistir a mi clase. En el primer corte sacó buenas notas. Pero al final no volvió. Creo que fue la decisión más acertada que pudo tomar en su vida y que hoy celebran miles de hinchas del ciclismo en Colombia. Me incluyo. Más adelante habrá tiempo para estudiar", aseguró el profesor Moreno en el libro de Mauricio Silva Guzmán.

LA HORA DE LA VERDAD

 Mientras comenzó su etapa como corredor de ruta el nombre de Egan Bernal fue tomando notoriedad con el pasar de los días, como lo había sido en su niñez en el ciclismo de montaña. En enero de 2016 el test de esfuerzo de Egan se filtró en la prensa y el 24 de enero el Diario Marca de España saludó al nuevo fichaje de Androni con este titular: "La bestia que viene". Con 19 años de edad, el colombiano corrió su primera prueba como profesional el 11 de febrero de 2016 con el uniforme de Androni Giovattoli. Fue el Tour del Meditarráneo, en Francia, de cuatro etapas. Terminó cuarto entre los jóvenes.

A inicios de 2017 Bernal cambia de apoderado con Giuseppe Acquadro, con el que el zipaquireño reconoce que fue de mucha ayuda para el resto de su carrera.

Egan y Nairo

EGAN Y NAIRO

El 8 de marzo de 2017 con 20 años, Egan se codeó con la crema y nata del ciclismo mundial en el Tirreno-Adriático, en Italia.

En la primera etapa, mientras Egan se acomodaba en la parte media del pelotón, observaba con orgullo a su compatriota Nairo Quintana, del que recordaba cuando se coronó subcampeón en el Tour de Francia 2013 a los 23 años, siendo Egan un adolescente de 16 años.

"Nairo iba al frente del pelotón y pensé que sería bueno ir a saludarlo. Pero la verdad es que me dio pena subir hasta allá solo para decirle 'hola'. Y no fui capaz. De pronto veo que él bajó el ritmo y vino a saludarme, a decirme: '¡Bienvenido al lote!'. Yo dije: !Qué grande este man, con todo lo que ha ganado, venir a saludarme!'. Ese fue un gesto que nunca olvidaré. Hoy somos buenos amigos", dijo Egan en el libro de Mauricio Silva Guzmán.

TODOS LO QUIEREN

Mientras Egan seguía rodando por las carreteras de Europa, su nombre se hacía más popular. Ya era un secreto a voces que varios equipos estaban interesados por el corredor de Zipaquirá entre ellos el team del Sky, sino el mejor, uno de los más grandes del ciclismo mundial en la actualidad.

Cuenta Savio: "Ya me habían llegado varias ofertas, y una vez le pregunté a Egan: '¿Qué es lo que quieres hacer'? Y él me respondió: 'Yo quiero correr en el mejor equipo del mundo. Eso es lo que quiero'".

Ya en julio de 2017 Sky había llegado a un término con el ciclista de Zipaquirá, lo llevó a Inglaterra para los exámenes de rigor, las medidas del uniforme y la presentación con los que iban a hacer sus compañeros, pero le advirtieron que por nada del mundo anunciara de su nuevo equipo. Se esperó a que el colombiano participara en el Tour del Porvenir de Francia (Tour de I'Avenir) de agosto de ese año. Una vez Egan se coronó campeón, como si Sky ya lo hubiera predestinado, el club inglés hizo público su fichaje a través de sus redes sociales, como el campeón sub 23.

Egan y su novia Xiomara

EN LA CASA DEL SKY 

El 10 de diciembre de 2017 Egan, con 20 años de edad, tuvo su primera concentración con el Sky que se extendió por diez días. Al día siguiente el colombiano conoció a Christopher Froome. Su reacción de ese momento mostró la sencillez del ciclista de Zipaquirá. 

"A la hora del almuerzo, yo entré al comedor y me senté en el último puesto a comer, muy calladito, sin saber nada más que dos palabras en inglés. Cuando de pronto apareció en el salón el campeón de cuatro tours de Francia. Yo lo que vi fue como la figura de un santo que flotaba en el salón, y creo que mi cara de idiota la debieron ver todos. De pronto, él empezó a caminar hacia mí y yo dije: ¡Mierda, me senté en su puesto! ¡Qué bruto! Él siguió caminando hacia mí y yo me quería morir. Entonces, cuando ya estaba encima, puso su mano en mi hombro y me saludó muy cordialmente. Él, que no tenía por qué hacerlo, lo hizo. Me habló un par de cosas y yo no le entendí ni papa. Después todo fluyó bien, porque él es una gran persona, un tipo muy tranquilo y muy generoso, muy a pesar de haber ganado todo lo que ha ganado".

Egan y Froome

En el 2018, Egan corrió 14 carreras entre ellas la UCI América Tour en Colombia (Colombia Oro y Paz) en la que se coronó campeón, el mejor entre los jóvenes y líder de la montaña. También hizo su primer tour de Francia donde fue un gregario de lujo para Geraint Thomas, el campeón de la prueba, y Chris Froome.  El colombiano terminó en el puesto 15, a 27'52" de su compañero de equipo, y fue segundo entre los jóvenes.

MOMENTO CUMBRE

En julio de 2019 el colombiano coronó su primer Tour de Francia, fue el mejor entre los jóvenes y el segundo lugar en la montaña. Pero unos meses antes de su consagración pasó algo que merece ser contado.

Después de ganar la París Niza a comienzos de marzo de 2019, Egan participó en la Vuelta a Cataluña de España que se disputó a finales del mismo mes y en el que su equipo estrenaba nuevo nombre, el team Ineos. El zipaquireño terminó tercero.

 El equipo buscaba que Egan hiciera buenos kilómetros y lo quería en perfecto estado -como único líder- para el Giro de Italia 2019.

A una semana del giro el colombiano se accidentó un 4 de mayo cuando entrenaba en las montañas de Andorra. Sufrió fractura de clavícula, era la cuarta vez. Mauricio Silva cuenta en su libro que antes de ser atendido en el hospital, en un arrebato de coraje, Egan le preguntó a su entrenador Xabier Artetxe que lo acompañaba: "Exactamente, cuánto tenemos para llegar al Tour de Francia? 

"Xabi, conmovido le respondió: 'Deja de pensar en eso. Primero miremos qué tienes y luego hablamos'. Pero Egan insistió, a lo que el español le dijo: 'Dos meses y dos días'". 

Poco después Egan volvió a montar bicicleta y en un mes y medio ya estaba en competencia, primero coronándose campeón en la Vuelta a Suiza que se disputó entre 15 al 23 de junio, en la que además terminó como el mejor entre los jóvenes.

ETAPA HISTÓRICA


Entonces llegaría el momento cumbre con la coronación en el tour de Francia 2019 y esa histórica etapa 19 accidentada por un deslizamiento de hielo. Ese 26 de julio Egan tomó el liderato. Pese a que todavía faltaban dos etapas por disputarse, nadie dudaba de que el campeón tenía nombre, nacionalidad y equipo.

Al final de la etapa 19 hubo una escena que conmovió a todo el mundo cuando el joven maravilla no pudo aguantar ante las cámaras de la televisión y dijo: "Solo se que tengo ganas de llorar". Por unos segundos todo quedó en silencio hasta cuando volvió a recobrar la compostura y señaló: "Van a tener que sufrir si quieren quitarme esta camiseta".

La historia de este campeón es como una película de ficción, a sus 22 años mientras gran parte de la juventud se deja de llevar por los placeres de la vida, Egan se dedicó siempre a buscar su sueño: llegar a ser alguna vez campeón del tour de Francia como dijeron sus más allegados. Todo el esfuerzo y sacrificio que cosechó en sus primeros ocho años en el ciclismo de montaña tuvo una cosecha fructífera en sus siguientes cuatro años en la ruta, que al final lo hicieron tocar el cielo con su bicicleta. Un mensaje claro para los jóvenes que dice: Sí se pueden conseguir los sueños cuando alguien se lo propone. 

La historia del campeón la plasmó de una manera vivaz el periodista Mauricio Silva Guzmán en su libro que lleva como tituló: Egan, el campeón predestinado.