jueves, 18 de diciembre de 2025

¡HASTA SIEMPRE, MI CAPITÁN!

NICOLÁS ESPINOSA 






Campo Elías Estrada
cestradacampo@gmail.com


Nicolás Espinosa Serrano se fue hoy jueves 18 de diciembre de este mundo, dejándonos gratos recuerdos de su rol como periodista y como ciudadano. Fue mi mentor en mi carrera de periodista, mi padre putativo, la persona que creyó en mí sin haberme conocido, en mis tiempos de universitario, solo por el hecho de haberme leído en el suplemento sabatino Mundo Deportivo del Diario La Prensa, que dirigía Reinaldo Weeks.  

Era el editor de la sección de deportes en los tiempos en que La Prensa era el referente del país en materia informativa. Le tenía respeto, porque en mis tiempos de universitario toparse con un editor de ese medio, era para admirar por la importancia que tenía el impreso en Panamá.

 Estando en el suplemento, por 1992, me llamó por teléfono fijo a mi casa para que le cubriera para la sección, los entrenamientos de la selección nacional que se preparaba para su eliminatoria a Estados Unidos 1994, desde entonces nunca más dejé de laborar allí hasta cumplir mi ciclo en el 2018, prácticamente en mi etapa de jubilado. 

Con Nicolás Espinosa me formé como periodista después de haber pasado por la aulas de la Facultad de Comunicación Social de la Universidad de Panamá. Fue un editor con temple, que exigía, que corregía, que tenía un temperamento firme a la hora de hablar del trabajo, pero fuera del diario, cuando salíamos y nos tomábamos unas cervezas, era otro Nicolás: más ameno y risueño, siempre separando sus dos roles.

Mientras fue mi jefe se encargó de mi bienestar laboral, a pesar que mi estatus era de turismo y estudiante, pero hizo todo lo posible, para que me quedara laborando en el diario y así sucedió, hasta que con los años arreglé mis papeles con lo de mi naturalización.

Junto a Nicolás sacamos un suplemento matutino durante el mundial del 2002 que fue un acontecimiento nacional, por las horas en que se disputaban los partidos en Japón y Corea del Sur, que eran en la madrugada, y el suplemento salía en las mañanas. Nunca antes se había registrado un hecho informativo de esta envergadura en el diario de la 12 de octubre.

Me hice profesional gracias al empuje de Nicolás Espinosa, que siempre exigía superación, de más está decir, que para mí, Nico, como le decíamos de cariño, ha sido uno de los grandes escritores de deporte en suelo panameño. Escribía con fineza y gran soltura del tema que fuera, no solo de deporte. Todavía recuerdo hoy una crónica que le hizo a una colonense que vivió la experiencia del 11 de septiembre del 2001 cuando quedó atrapada en una de las torres del World Trade Center en Manhattan, Nueva York, en ese acto terrorista que conmovió al mundo. Fue un escrito espectacular de lo mejor que leí en La Prensa. Siempre quedó marcado en mi memoria.

Nicolás fue amante del boxeo y el béisbol, principalmente, escribía con mucha autoridad de los dos deportes y siempre nos inculcó opinar en columnas, para que el público conociera el sentir del periodista, más allá de la mera noticia.

Nicolás Espinosa (Der.) junto a su compadre Rodolfo Newlan (c) y este servidor.



De allí nació mi pasión por la columna de opinión y la creación de mi "Tiro a gol", que comencé a publicar en 1996. Hoy, gran parte de lo que soy como periodista se lo debo a este colonense, con el que hasta hace unos días hablábamos de todo un poco, no solo del fútbol.

También practicó deportes, como el softbol y el fútbol, en su etapa adulta escribió un libro de béisbol panameño y aportaba sus conocimientos en un espacio semanal en la decana, La Estrella de Panamá.

Del fútbol, cómo no recordar al emblemático Real Flu Fla, como él bautizó al equipo de la sección de deportes de La Prensa, que no solo participaba en la liga recreativa del diario, sino que también en la Liga de Futsal Solo Periodistas que todavía continúa vigente. 

Allí fue el gran capitán, era una muralla, un central recio y rudo, donde pasaba el balón pero no el rival.

En muchas tertulias no dejábamos de hablar del Real Flu Fla, hasta nos reunimos para conmemorar los 20 años de fundación de  la liga Solo Periodistas, en los tiempos de Camilio Jipsion. Ese nombre era nuestro emblema, nuestro orgulloso para los que jugamos allí, en el que Nicolás Espinosa, que fue su gran capitán, hoy se nos adelantó a sus 64 años.

Hoy podremos referirnos de muchos temas en la sección de deportes de La Prensa, entre los viejos colegas que laboramos en ese medio, pero hay un hecho histórico que nunca podremos pasar por alto, cuando nos remitemos a Nicolás Espinosa, siempre tendremos que hablar del equipo de sus amores.

¡Hasta siempre, capitán! 

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