HONRAR LA PATRIA CON PROTESTAS

 NOVIEMBRE

Protestas en Panamá  FOTO/EFE

Campo Elías Estrada

cestradacampo@gmail.com

Lo que hoy vive Panamá es deprimente para el gobierno y esperanzador para el pueblo. 

Frente a la problemática que tiene el gobierno con el tema de la minera Panamá, el pueblo se ha involucrado de lleno con las protestas, el único recurso viable que tiene en sus manos para mostrar su descontento, sin importarle las consecuencias. 

Las marchas han sido continuas hasta altas horas de la noche, sin parar los fines de semanas, algo inimaginable en un país acostumbrado a hacer un alto en el camino los sábados y domingos.

Y llegó el mes de noviembre, en el que se le hace tributo a la patria, que nos atrapó en medio de las marchas callejeras, en el que no habrán los tradicionales desfiles patrios del 3 y 4. En mis 41 años de residir en este país, jamás se había visto.

Los desfiles patrios serán reemplazados por las caravanas de protestas que se harán a lo largo y ancho del país, en el que el panameño ha protestado con banderas en mano, casi quince días antes de que llegara el mes patrio.  

El domingo, el gobierno informó de su decisión de someter a una consulta popular para diciembre, la controversia sobre el contrato ley 406 de 2023, entre el Estado panameño y la minera Panamá. Pero ni eso ha menguado el descontento de un pueblo, que no ha dejado de protestar.

Todos, sin distinción de edades, se quieren sumar a las protestas. El descontento ha unido a un país a pesar de los tranques que se forman todos los días y que hace terrible el poder circular normalmente por las calles. Pero en su mayoría, todos entienden que esto es consecuencia de una lucha que por el momento no tiene tregua y que gracias a Dios, no ha arrojado muertes, aunque si algunos actos vandálicos y perdidas millonarias en la economía del país. 

Tal vez muchos de los que protestan no conocen ni han leído el contrato minero, solo saben por lo que se divulga en las redes. Sin embargo, por estos días se conoció que algunos legisladores que aprobaron el contrato, dieron su voto para la aprobación de la ley sin conocerla ni haberla leído, dejándose influenciar por los que la estaban promulgando.

Este es el panorama con el que nos atrapó el mes de la patria. El pueblo no quiere una consulta pública, porque es evidente que la consulta ya se ha hecho con las protestas en todo el país, que como bien se dice, han sido de carne y huesos. Lo que se pide es que se derogue por completo la ley sin poner de por medio al pueblo, que durante todos estos días ha dicho no al contrato minero.

Pues bien, en medio de este panorama deprimente del gobierno, este es solo uno de los problemas que más adelante se le vendrá al que gane las próximas elecciones electorales, que hoy también es un pandemonio, con tantos candidatos y un electorado que se encuentra en incertidumbre a la hora de votar, porque la panorámica política es tan desalentadora como el tema que hoy tiene al panameño en las calles.

El próximo presidente tendrá que hacerle frente a problemas tan conflictivos, como por ejemplo, el tema del seguro social, que seguramente tendrá el mismo impacto o peor, que lo que hoy se vive con lo de la minera.

Pero no nos adelantemos a los hechos. La vida hay que vivirla día a día, por el momento habrá que hacer patria en el mes de noviembre con la bandera en mano durante los días de protestas. Ese va a hacer el tributo con el que por primera vez se la honrará .

Que como bien escribió Rubén Blades: Patria son tantas cosas.