jueves, 14 de octubre de 2021

EL MAL SABOR DE VISITANTE

TIRO A GOL 





Campo Elías Estrada
cestradacampo@gmail.com


Primero fue El Salvador, el jueves 7 de octubre, y luego Canadá, seis días después, que hicieron ver mal a Panamá cuando juega fuera del estadio Rommel Fernández.  En el Cuscatlán se le echó la culpa a la cancha que estaba mojada y que no permitió el juego fluido de la selección. Ayer, en el BMO Fiel de Toronto, se le achacó la derrota (4-1) al error de Cummings y a los cambios del entrenador. Ese es el sentir de aficionados y algunos medios.

Hoy muchos no consideran lo difícil que es jugar de visitante donde históricamente, en eliminatorias, Panamá no es un dechado de virtudes. Se pensaba que por la manera como se jugaron los primeros tres partidos y, en especial, el del domingo ante Estados Unidos, ya teníamos agarrado el cielo por las manos,  que se iba a derrotar a cualquiera que se nos pusiera por delante, pero nuevamente, en un lapso de seis días, le volvió a salir la bruja a la selección.




El Salvador y Canadá, cada uno a su manera, nos hicieron ver mal. Y hago un paréntesis con Jamaica en Kingston, que sin desmeritar lo que hizo la selección, me parece que fue el partido más fácil y el rival más flojo con que un seleccionado panameño se haya enfrentado en estas fases finales.

Históricamente, Panamá no ha sido constante en eliminatorias cuando se trata de un partido de visitante en fases finales. En seis partidos de estas lides, solo se había derrotado una vez al equipo de la hoja de maple en el Rommel Fernández; mientras que como visitante, con el choque del miércoles, se ha perdido en las cuatro visitas. 

Si echamos una mirada atrás, solo se ha vencido a Honduras y Jamaica en las últimas dos eliminatorias, inclusive con el Cheché Hernández también se venció en Kingston por primera vez a los caribeños. A nadie más se ha derrotado en estas instancias finales. Por allí se empató sin goles con Costa Rica y Haití, y paren de contar.






Con Thomas Christiansen podría haberse mejorado el estilo del equipo o de su juego, pero cuando se trata de jugar de visitante Panamá es otra cosa. La historia no ha cambiado, al menos por el momento. 

El pasado domingo fue un día histórico por su primer triunfo ante Estados Unidos, con un equipo compacto, luchador, con hambre de ganarle a uno de los grandes del área, pero este miércoles la selección cambió, o mejor dicho, Canadá la hizo ver diferente por su fútbol más explosivo. Para mi es la selección de más progreso en el área en los últimos años, un equipo veloz, dinámico y renovado.




Me puse a comparar las últimas dos alineaciones de Canadá, Estados Unidos y México. Los canadienses iniciaron con cinco nuevos jugadores respecto al partido del domingo que empataron de visitante con Jamaica; Estados Unido hizo nueve cambios en su plantel inicial en comparación al equipo que perdió en el Rommel Fernández, mientras que México modificó su equipo que goleó a Honduras en el Azteca con ocho cambios. Los tres le han dado rotación a sus planteles, es natural, tienen de donde escoger, que muy bien pudiera ser una de las razones por la que están al frente del octogonal camino a Catar 2022.

La situación de Panamá es diferente, más limitada, pareciera que no hay de donde escoger. El técnico danés hizo un cambio en Canadá respecto a su encuentro del domingo con los gringos, incluyendo a José Luis Rodríguez por Freddy Góndola. No se si repetir todo el plantel haya influido en el rendimiento, pero hay que considerarlo, porque son dos partidos seguidos en un lapso de 72 horas. 

Si en los primeros tres partidos le resultó el plantel a Christiansen, en los siguientes tuvo que hacer dos cambios obligados entre el once habitual, por las lesiones de Andrade y Carrasquilla, que fueron dos de los jugadores más regulares de Panamá. El miércoles pareció como si el resorte haya dejado de estirarse después de todo el esfuerzo que se tuvo que hacer el domingo ante Estados Unidos, que fue descomunal.

Por eso no creo que el cambio del Negrito Quintero haya sido malo, me parece que el número 19 de la selección no tuvo el ritmo que le vimos ante los gringos, no se notó ante Canadá, es más vi que por momentos estaba con la cabeza caliente, por eso lo de la sustitución, más allá de que se haya enojado al salir. Tampoco podemos desconocer que cuando el Negrito está en su día o en su noche, la selección es otra, pero el miércoles desentonó como la mayoría de sus compañeros.




Con respecto a los cambios, también me parece que no le brindaron ninguna ayuda a Christiansen, algunos no los entendí, frente a una selección canadiense que fue mejor que Panamá y que, a mi juicio, con el error o no de Cummings y los cambios del entrenador, se iba a perder de todos modos el partido.

Hoy pareciera que Panamá no tiene un plantel B en su equipo inicial o que no haya confianza de parte del entrenador con el resto de los convocados. Christiansen se ha ido con la fija, con los que le han sacado los resultados so pretexto de que jueguen todos los partidos. Los jugadores que ingresan son los mismos, algunos con pocos minutos para mostrarse, lo que hace difícil pensar en ganarse la titularidad. Entiendo que una eliminatoria no es para probar, allí tiene que estar lo mejor de lo mejor, lo que le complica la situación a los que aspiran a ganarse un puesto en la nómina inicial. 

 Por el momento César Yanis, Alfredo Stephens, José Fajardo, Abdiel Ayarza, Cecilio Waterman, Azmahar Ariano, Eduardo Guerrero, César Blackman, Freddy Góndola, Gabriel Torres, Jair Catuy, y Armando Cooper, unos con más minutos que otros, son el relevo de los 11 titulares que han estado en los primeros seis partidos del octogonal. 

El miércoles Canadá fue una tromba y en base a velocidad fue demoliendo a su rival, su estrella Alfhonso Davies, quien en noviembre cumplirá apenas 21 años, le hizo la vida de cuadritos a Panamá, hizo lo que quiso. Mucha calidad la de este jugador que mostró el porqué es miembro del Bayern de Múnich de Alemania.

Próximos partidos de Panamá, el 12 y 16 de noviembre.



Por otra parte, el error de Cummings fue de principiante. Al jugador de 29 años le faltó cancha, no cubrió el balón ante la bala de Davies, que nunca le perdió la vista al balón desde el momento en que arrancó su carrera por la línea del lateral. Pero tampoco creo que se le debe echar toda la culpa al colonense, recalco, que con ese error o no, el comportamiento de los canadienses, incluso con el 1-1, era de ganadores.

Es la segunda vez que Panamá pierde la concentración como visitante ante Canadá, en momentos determinantes. En los tiempos de Julio Dely Valdés se perdió 1-0 con un error de la defensa nuestra que se durmió en el cobro de una falta de los canadienses cerca al área de las 16.50, que lo hicieron rápido, mientras los nuestros estaban dando la espalda, para anotar el único tanto de ese encuentro.

Estos son los partidos de la eliminatoria, donde ganar de local o de visitante es difícil. Allí no se puede parpadear porque te la cobran. Cada partido es una historia y más cuando se tiene que salir del patio. Esperemos que Panamá siga aprendiendo de este mal endémico y que para su próximo partido en noviembre no se confíe en su visita a Honduras, el rival al que se le viene ganado en sus últimos encuentros de eliminatoria.

En seis fechas este octagonal está de locos. Panamá gana de visitante (0-3) a Jamaica y Canadá no pasó de un empate sin goles. El miércoles los caribeños ganaron a domicilio a Honduras (0-2) que es colero con tres puntos. Los catrachos ya habían perdido por goleada (1-4) en casa con Estados Unidos, lo que motivó que destituyeran a su entrenador. 

Por eso Panamá no se  puede confiar del mal momento de Honduras. Los jugadores tienen que prepararse para asumir el partido con responsabilidad, humildad y profesionalismo. No caer en el juego de los aficionados y periodistas. Será un partido tan difícil como cualquiera. 

Por fortuna los resultados de la sexta jornada favorecieron a Panamá, que solo perdió el tercer puesto para bajar a la cuarta casilla con 8 unidades. México es líder con 14 unidades, siguen Estados Unidos con 11, Canadá con 10 y Panamá, hoy en puesto de repechaje.

Esto recién comienza, faltan ocho partidos.

     


2 comentarios:

  1. Rescato aquello de que "una eliminatoria no es para probar", eso es así. Además, con todo el aura de exitismo que nos rodea se nos olvida que al frente hay once jugadores que van a intentar lo mismo que los nuestros: ganar. Sin duda, un buen análisis.

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    1. Gracias mi estimado Carlos E. Exacto, el resto de los siete participantes tienen lo mismos sueños que los panameños. Saludos.

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